domingo, 30 de junio de 2013

Lo que la cultura acepta y lo que las personas necesitan

Lo que la cultura acepta y lo que las personas necesitan

A lo largo de este curso de introducción a la universidad, se han tocado diferentes temas, muchos de los cuales han sido tanto interesantes como controversiales, lo cual ha producido discusiones. En estas discusiones me ha llamado la atención la forma en que se menciona y propone la cultura, ya que por un lado se la culpa de todo aquello que la universidad considera un problema, es decir si alguna persona no está de acuerdo con algo que la universidad quiere que esté de acuerdo, no es que esa persona tenga una opinión, criterio o valores (escogidos) propios, si no que la sociedad-cultura son “culpables” de eso, como si el colectivo, estuviera totalmente equivocado y como si las personas no pudiéramos decidir de forma individual e independiente que es lo que nos gusta, en otras palabras lo que la cultura acepta es lo que yo “debo” considerar correcto, y por lo tanto se busca crear un cambio en la cultura  “incorrecta” para que más tarde esta sea la que decida por mí que es lo correcto y que es lo que debo creer.

(Lo siguiente lo digo no criticando a quien lo dijo sino más bien exponiendo las debilidades de las ideas que se han vuelto populares en las universidades y que además se consideran norma)
He escuchado cosas como que en algunas culturas se considera aceptable que los papas estén prácticamente ausentes en la vida de sus hijos, y yo me pregunto ¿Qué la cultura acepte la ausencia de los padres hace que los hijos los necesiten menos? ¿Quién va a asumir la responsabilidad de cubrir las necesidades afectivas de los niños? Supongo que la cultura puesto que ella es quien justifica la ausencia y libera a los padres de toda responsabilidad, de todas formas tiene demasiado que ofrecer durante las horas que las nuevas generaciones de niños gastan a solas en casa, por ejemplo los canales de música que pasan canciones de reggaetón, lady gaga, Rihanna y muchos más, con sus contenidos que invitan al sexo y la violencia ¿qué me dicen del anime cargado de agresión? ¿qué me dicen de los miles de sitios web porno que inundan internet? No es que todo sea malo, pero es que la niñera electrónica no es muy prudente, requiere la intervención de un adulto.

El anterior es solo un caso de una justificación cultural que termina dañando la sociedad, pero hay muchos más, es como si la cultura funcionara en contra de las necesidades de las personas, un caso muy particular y que se está convirtiendo en un factor común a nivel mundial es la concepción del divorcio como algo común y corriente, yo tengo claro que el divorcio a veces en completamente necesario, como por ejemplo en los casos de infidelidad y agresión pero el problema está en que el matrimonio y la familia ahora se ven como algo muy light, ya no se trata de dos personas que van a trabajar juntas para hacer que funcione, sino de dos personas que van a estar juntas en tanto funcione, o como alguien dijo por ahí “en tanto el sentimiento sea bueno”, y yo me pregunto ¿Qué va a pasar cuando vengan los problemas? ¿Cómo pueden haber familias unidas cuando todo se ha vuelto tan frágil y cambiante como las emociones de las personas?

Es probable que pueden haber varios cientos de ejemplos en los que la cultura se usa como justificación de conductas destructivas, pero en medio de toda esta locura, los puntos de vista realistas y razonables vienen de los lugares menos pensados, les dejo el link a una canción muy buena de blink 182, que habla sobre esto, se llama stay together for kids.


El punto es que independientemente de lo que la cultura diga, las personas debemos entender claramente que es lo que conviene y que es lo que necesitamos, para así poder tomar decisiones adecuadas porque la verdad la cultura de hoy, parece estar jugando en nuestra contra.

domingo, 16 de junio de 2013

Es bueno defender lo bueno, pero en la forma correcta

Me alegra que hoy a las personas negras se les respete mas y se les trate mejor que antes, pero está claro que todavía falta mucho que hacer, y en realidad no sé si debería de sentirme feliz con el hecho de que la hostilidad hacia ellos sea menor, porque esa hostilidad no debería de existir y el trato debió de ser bueno desde siempre, es muy triste y vergonzoso pesar a las personas por el color de su piel, su acento o por el lugar de donde vienen.

Creo que uno debe de escoger a la gente, pero basándose en el carácter y los valores, no en aspectos superficiales. Está claro que los grupos que trabajan para que se genere un cambio en la sociedad son muy beneficiosos, a lo largo del tiempo grupos de este tipo junto con líderes talentosos han logrado cambiar lo que se consideraba incambiable, Martin Luther King y Nelson Mandela son solo dos ejemplos de personas que convirtieron este planeta en un lugar más justo.

La pregunta que me hago es, ¿qué pasa cuando los “lideres” de estos movimientos no son los correctos? Esta pregunta puede tener varias respuestas, existirán los casos en los que los resultados serán neutrales, también abran algunos en los que el resultado será negativo y los movimientos defendidos terminaran por tener una opinión pública peor de la que había en un inicio y por lo tanto las personas involucradas se encontraran en una situación aun más desfavorable.

Pero los 2 casos anteriores no son los peores, si bien convierten la lucha por los derechos en algo inútil y negativo respectivamente, hay un escenario que es mas preocupante, ¿que pasa cuando se combina una causa justa con intereses políticos o personales nada justos? Como dicen por ahí, se junto el hambre con las ganas de comer, las buenas intenciones terminan por dar paso al extremismo y la dispersión de ideas negativas, se aprovechan del vehículo de la lucha social para sembrar la semilla de la discordia.

Mucho cuidado cuando alguien llegue diciendo que  defiende a los negros y también es feminista o que defiende a los asiáticos y también es machista o cosas por el estilo, que de por sí ya suenan bastante ridículas, sobre todo si las actitudes de quienes hablan se muestran hostiles, a otro perro con ese hueso, vienen a hablar de otra cosa, vienen a hablar de sus propias intenciones.


Ojala  que en  el futuro hayan mas personas defendiendo buenas causas pero ojala que lo hagan bien y en paz y no desaprobando a quienes tienen opiniones diferentes o se equivocan, con miradas de ira. 

martes, 4 de junio de 2013

De la comunicación tacita, los soldados caídos y las tortugas


De la comunicación tacita, los soldados caídos y las tortugas


Dice una canción de Alejandro Sanz “palabras y un lenguaje nuevo que he construido para nosotros, para el amante perseguido que tiene que esconder su voz, cuando decidas aprenderlo no abra silencio, no te hará falta usar la voz para romperlo, si tú me miras me hablaras” eso describe perfectamente lo que es la comunicación tacita, es aquello que no se dice pero se transmite, sin embargo está variante de la comunicación está lejos de ser exclusivamente usada por los “amantes perseguidos”, parece que también es la forma de comunicación preferida por aquellos que quieren darnos “tuerca” como dicen por ahí, o en otras palabras aquellos que quieren “castigar” a quienes tienen intereses contrarios a los suyos.


Todos los días se nos bombardea con muchos de esos mensajes, algunos de los cuales percibimos y otros no, esta semana que paso se nos envió un mensaje que gracias a Dios no es muy común en nuestro país y no recuerdo haberlo oído desde que mataron a Parmenio Medina, pero tristemente a través del asesinato de Jairo Mora Sandoval se nos dijo que lo mejor es no defender a las tortugas o lo vamos a pagar con nuestras vidas, yo no conocía a Jairo y en realidad ni siquiera sabía que alguien defendía a las tortugas en nuestro país, pero cuando supe de su muerte y lo que él hacía, de inmediato sentí que uno de los que jugaban en nuestro equipo se había ido.


Yo no sé ustedes pero yo admiro a las personas como Jairo, porque yo no defiendo a las tortugas pero aun así si llego a tener hijos espero que ellos las puedan conocer y creo que a muchos de ustedes también les gustaría, y Jairo que no me conocía y probablemente no conocía a ninguno de ustedes era el que estaba luchando por eso, no sé si todos lo notamos, pero si, cuando se metieron con él, se metieron con nosotros, con los que queremos construir , con los que todavía creemos que vale la pena trabajar para que este sea un mejor lugar.


La pregunta es ¿Qué vamos a hacer? Bueno yo no estoy considerando irme a vivir a Limón, ni tampoco pretendo convertirme en un activista de alguna organización ambientalista, pero se me ocurre que tal vez dejándole saber a mis compañeros lo que pienso podríamos dar una respuesta tacita a lo que paso, ya que los que se roban los huevos lo hacen porque hay quienes los compran y si no los compráramos nadie se los robaría, así que yo decidí no comer huevos de tortuga, en realidad eso lo decidí hace años pero también decidí pedirles a quienes conozco que comen huevos de tortuga, que no lo hagan más, de esta forma quienes matan a las tortugas y se llevan el patrimonio de todos tal vez puedan percibir nuestro mensaje y  aun si no lo hacen habremos respondido, y nuestra respuesta habrá sido consecuente con lo que hacemos y creemos. Esperemos que llegue el día en que sin decir una palabra ellos escuchen, “será mejor que se busquen otra forma de conseguir dinero porque sus huevos de tortuga ya nadie los quiere”